Aunque muchos de los cambios más importantes en ti y tu bebé ya han sucedido, durante la semana 35 de embarazo es normal que el bebé comience a descender en la pelvis, acomodando su cabecita en la zona baja y apoyándose en el cuello del útero, lo que te creará mayor presión en esta zona.
Sin embargo, y como ya habrás notado, el tiempo de los bebés no es exacto, por lo que, si tu bebé aún no adopta esta posición, no debes preocuparte. Tu pequeño/a aún cuenta con el espacio suficiente para voltearse dentro del útero.
Otro de los cambios que podrás notar fácilmente, es que tu bebé no da tantos saltitos como antes, pero sí continúa moviéndose, y muchos de estos movimientos puedes notarlos al tocar o incluso mirar tu pancita.
En cuanto a sus órganos, su hígado, riñones y pulmones ya están estructuralmente desarrollados, pero aún en proceso de maduración, por lo que en las semanas restantes tu pequeño/a sólo seguirá creciendo en tamaño y peso, y terminando de madurar sus órganos.
Durante la semana 35 de embarazo, la piel de tu bebé ya es más lisa gracias a la mayor acumulación de grasa en sus tejidos, y tiene un color rosado. Además, la vérnix caseosa que la cubre actuará como lubricante para ayudar a salir a tu bebé en caso de un parto vaginal.
Y si te preguntas por las contracciones, seguramente desde hace unas semanas has comenzado a sentir las llamadas “Contracciones de Braxton Hicks”, las cuales son la forma en la que tu cuerpo se está preparando para el trabajo de parto. No suelen ser dolorosas y puedes distinguirlas por no tener un patrón regular durante el día. De todas formas, si tienes este tipo de contracciones muy seguidas, debes consultar a tu especialista con el fin de evitar señales de un parto prematuro.
Las fugas accidentales de orina también podrían ser más comunes en esta etapa avanzada del embarazo. Entre la fuerza y presión que ejerce el bebé y sus movimientos, es posible que tengas pequeñas fugas. Por lo mismo, ejercítate y ayuda a tu cuerpo a contener estos incómodos accidentes.
En cuanto a exámenes, es muy posible que tu especialista te pida realizar un análisis para descartar la presencia de streptococo agalactiae, una bacteria inofensiva para ti pero que podría causarle algún tipo de infección a tu bebé durante el parto.
¿Estás lista para conocer a tu bebé? ¡Ánimo! ¡Ya queda poco tiempo y lo estás haciendo muy bien!
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