Si bien en el mundo existen varios sistemas de certificación, es importante saber que en Chile sólo dos son válidos: la certificación europea y la certificación americana.
Si la etiqueta del SRI de tu pequeño indica que está certificada bajo la normativa FMVSS213, significa que cumple con los estándares exigidos según la norma de seguridad americana.
En cuanto a sus características, es importante saber que las sillas bajo esta normativa cuentan con conectores tipo LATCH, que tienen como principal característica el ser correas flexibles que se enganchan a tu vehículo, tensándose, y manteniendo el SRI seguro. Pero también se autoriza, según sus características e indicaciones, a instalar el SRI con cinturón de 2 puntas.
Adicionalmente, algunos de estos sistemas de retención infantil pueden contar con sistemas extras de anclaje como un Top Tether o un pie de apoyo, los que no son una exigencia.
En cuanto a la contramarcha, los sistemas de retención infantil que cumplen con la certificación americana no necesariamente deben tener contramarcha extendida, pero sí cumplen con llevar a nuestros pequeños protegidos en esta posición hasta, al menos, los 2 años dependiendo del modelo. Incluso, algunos tienen mayor vida útil en esta posición.
En cuanto a la instalación propia de tu pequeño, esta normativa indica que los niños deben llevar el arnés incluido en la silla hasta alrededor de los 6 años, insertando sus hebillas en el broche de forma independiente.
Otra característica propia de esta certificación es que muchos modelos incluyen el clip sujetador de pecho o llamado “chest clip”, que ayuda a mejorar la posición del arnés evitando que los niños se lo quiten fácilmente.
Por otra parte, es clave saber que estas sillas cumplen con testeos y pruebas de impacto frontal a 48 km/hr, donde por medio de un simulacro se valida que las sillas cumplan con el objetivo de mantener a nuestros niños y bebés seguros en caso de un accidente.
Estas pruebas se realizan en laboratorios que simulan un accidente, y donde el rol del niño lo cumple un muñeco llamado “Dummy”, que incorpora diferentes sensores capaces de medir la fuerza del impacto y los daños.
Además, el mismo fabricante realiza diferentes pruebas que validen la seguridad del sistema de retención infantil, o bien, valida que el proveedor de las diferentes partes de la silla haya realizado previamente pruebas de seguridad y calidad.
Luego, estas sillas pasan, aleatoriamente, por pruebas que realiza el National Highway Traffic Safety Administration, quien valida el cumplimiento y seguridad de las normativas, y en caso de detectar alguna irregularidad, realiza un llamado de alerta a los diferentes clientes con el fin de informar y evitar accidentes innecesarios.
En cuanto al límite de peso, la normativa americana en comparación a su símil europea, soporta una mayor cantidad de peso a pesar de poder ser recomendadas para niños de la mis talla y edad. Por eso es clave siempre asegurarse del peso de nuestro pequeño.
¡Infórmate y asegúrate siempre que el SRI que tu pequeño usa es el correcto para su seguridad y tu tranquilidad!
¡Cuidamos lo que más amas!