Tamaño y peso de tu bebé: No todas las sillas son para todos los niños. Por eso, comienza teniendo claro el peso y tamaño de tu bebé para saber cuál es la ideal según su etapa.
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Silla Nido: Este es el primer sistema de retención infantil para tu bebé y también es conocido como “huevito”. Sirve para bebés recién nacidos y hasta los 9, 13 o 15 kilos, dependiendo del modelo que seleccione.
Debes instalarla siempre en el asiento trasero a contra marcha, es decir, en sentido contrario al que avanza el auto. ¿Por qué? Básicamente, porque tu bebé necesita una posición que proteja su zona cervical. No olvides que aún no tiene la fuerza suficiente para sostener su cabeza.
- Silla Convertible : dependiendo de cada modelo, este tipo de sillas es perfecta para acompañar y proteger a tu bebé desde el primer día hasta los 36, 45 o incluso 54 kilos.
Además, te ofrece la posibilidad de instalarla en contramarcha, o contra marcha extendida si el modelo lo permite, para luego rotarla a posición a favor de la marcha y así seguir disfrutando de su comodidad y seguridad. -
Combinadas: Recomendadas para niños desde los 9 kilos, es decir, desde que tienen aproximadamente un año. En un comienzo, tu pequeño irá seguro con el arnés interno, pero a medida que vaya creciendo podrás transformar tu silla en una butaca. Al igual que en las Sillas Convertibles, este tipo de sistema de retención infantil adquiere una variación de acuerdo con su capacidad, por lo que puede ser útil hasta los 25, 36 kilos, o incluso hasta los 54, dependiendo del que modelo.
En cuanto a su instalación, las Sillas Combinadas sólo deben instalarse a favor de la marcha.
- Butaca sin arnés:Perfecta si tu hijo pesa entre 22 a 36 kilos, es decir, si tiene entre 6 a 12 años aproximadamente. En esta etapa, la función de las sillas comienza a ser mantener a tu pequeño con la altura suficiente para que el cinturón de seguridad de tres puntos pase por el tórax y no por su cuello. Por lo mismo, este tipo de SRI no incluyen arnés.
- Alzador: Entre 6 a 12 años. Peso entre 22 y 36 kg aprox. Debes instalarla en el asiento trasero, siempre mirando a favor de la marcha.
Tu tipo de vehículo: Aunque no lo creas, muchas personas compran la silla para el bebé sin tomar en cuenta el espacio interior del que dispone. Por eso, te recomendamos visualizar el espacio donde irá la silla y orientar la búsqueda en función a eso.
Grupo familiar: Es importante considerar la cantidad de personas que componen tu familia, pues cada uno de los integrantes deben ir cómodos y seguros en cada trayecto.
Sistema de anclaje: Este punto es muy relevante al momento de la elección, pues debe tener en cuenta que sea compatible con su auto.
¿Cómo saberlo? Revisa previamente el manual de tu vehículo y ve si cuenta con sistema de anclaje isofix, latch o el cinturón de seguridad, que puede ser de 2 o 3 puntas.
Peso y estatura: Este punto es fundamental al momento de buscar la silla adecuada, pues no todas están hechas para la misma etapa de tu hijo. Ten en consideración su peso, estatura, edad y contextura para así encontrar la que sea más segura para tu pequeño.
Contramarcha: Si tienes un bebé recién nacido, ten en cuenta que su asiento o huevito debe ir en contramarcha. Según estudios, esta es la posición más segura para que viaje tu pequeño de hasta 4 años, pero debes tener en consideración que no todas las sillas tienen esta opción, por lo que debes fijarte hasta qué cantidad de kilos te permite la silla instalarla en esta posición.
Niveles de reclinación: Asegúrese de que la silla sea cómoda y que cuente con diferentes niveles durante la reclinación, así su bebé viajará a gusto y muy seguro todo el trayecto.
Que sea fácil de limpiar: Por el uso o de forma accidental, la silla se irá manchando de forma inevitable. Por eso, prefiere una silla que tenga una cubierta desmontable para que pueda sacarla y lavarla cuantas veces necesite.
